lunes, 7 de diciembre de 2020

JUZGAR EL PLACER - Sobre la lectura de "El último catón", el superventas de Matilde Asensi

 


Soy un fiel seguidor de la escritora bestseller, y longseller, alicantina Matilde Asensi. Y he sido testigo de lo golpeada que ha sido desde el inicio de su carrera por escribir un género muy vendido pero considerado menor. Cuando ella saltó a la fama, a finales de los noventa, viniendo del periodismo y convirtiéndose en novelista, se colocaba segunda en éste camino en España que ya había empezado a transitar Pérez - Reverte antes. Sin embargo, por ser publicado en un grupo editorial que contaba con el favor de ciertos sectores de la prensa, apenas recibía alguna que otra crítica negativa. Con Matilde, en cambio, los lobos fueron feroces. 
En la época que Asensi comenzó a publicar en España sólo el cuatro porciento de la población leía, compraba y consumía libros. Y unos pocos críticos, desde una superioridad que olía a naftalina, decidían qué era lo que se tenía que leer. 
Hoy por hoy en España más del cuarenta seis por ciento de los habitantes leen, compran, y consumen libros. Y casi todos leen no sólo los libros de Matilde Asensi, auténtico fenómeno en su país y en el resto del mundo, sino otros libros bestsellers españoles de muy buena calidad.
Sin embargo, esta categoría sigue siendo vapuleada. Los bestsellers no son sinónimo de libros malos sólo son libros muy vendidos; y a veces con muy buen nivel de creación.
"El último catón", la novela más conocida, traducida y vendida de Asensi, cuyos números de ventas, fanáticos y lectores harían quedar sin aire a más de uno, es un auténtico libro inolvidable que logra que el lector recuerde la magia de la lectura; esas sensaciones que hicieron que descubriera la magia de la lectura y se quedara en ella y la militara por siempre. Pues bien, Asensi actualiza la potencia de estas sensaciones con una obra que no da respiro y que se gana el corazón de la gente. De hecho, catorce años luego de su publicación, y por cansancio, Asensi tuvo que rendirse ante los pedidos de los fanes, que eran miles, y escribir una secuela que repite el éxito de sus libros anteriores y refuerza el vínculo con sus seguidores.
No me arrepiento de mis gustos literarios. Soy un junco que se dobla. Puedo leer perfectamente a Homero o a Dante, a Le Guin y a J.J Benitez , a Lispector y Joyce Carol Oates, o a Tolkien y Manuel Puig. La literatura, y el acto de leer, no puede basarse, nunca, en una prohibición, ni en un juzgamiento - penoso - o una crítica. No existen los géneros menores. Todos los géneros son importantes; los escritores tienen derecho a escribir en cualquiera de ellos. Los lectores son libros de leer lo que les plazca y nadie puede pretender criticarlos.
Hay espacio para todos, debe haber espacio para todos.
Conozco más de un paleógrafo, historiador, licenciado en Letras y demás que disfrutaría como un niño en un parque de diversiones de la lectura de los libros de Matilde Asensi (ni hablar de los arqueólogos).
Llevo años disfrutando de esta autora, y años, también, recomendándola sin parar, siempre, con resultados positivos.
Asensi se toma muy en serio su trabajo, y a sus lectores,  por lo que ninguna de sus obras decepciona (aunque claro - depende la temática - pueden algunas gustar más que otras -).
Una cosa es cierta: de el embrujo de "El último catón" nadie escapa. Es el paraíso y la prisión más hermosa que existe. Gracias a su lectura se olvidarán de comer, de dormir, de descansar. Sólo importará el libro, el acto de leer y nada más.
En "El último catón", longseller que ha vendido más de quince millones de ejemplares y contando, no hay marketing, ni modas, ni golpe de suerte. Existe una autora repleta de facultades y talentos, totalmente inspirada, que brinda una obra perfecta, sabia y entretenida, donde se puede aprender muchísimo divirtiéndose.
Si decimos siempre que leer abre mentes y caminos no los cerremos juzgando géneros, números de ventas siendo prejuiciosos y desconfiados. Hay talentos, historias, lectores y sus amores que no merecen tamaña injusticia.

JUZGAR EL PLACER - Sobre la lectura de "El último catón", el superventas de Matilde Asensi

  Soy un fiel seguidor de la escritora bestseller, y longseller, alicantina Matilde Asensi. Y he sido testigo de lo golpeada que ha sido des...